Descripción
Visitar la Laguna Baya es adentrarse en un rincón de los Andes donde la fuerza de la naturaleza escribió su propia historia. Hace apenas unas décadas, un gigantesco derrumbe dio origen a esta laguna, recordándonos que el paisaje está vivo y en constante transformación. El camino hacia ella es un viaje que despierta los sentidos: kilómetros de piedra pómez que crujen bajo tus pasos o el trote del caballo, imponentes formaciones volcánicas que parecen esculturas naturales, y la silueta majestuosa del Cerro Campanario custodiando el horizonte. A medida que avanzás, la serenidad de la Laguna Baya se abre paso como un tesoro escondido, acompañada por la belleza de las lagunas Maule y Cari Launa, que tiñen el paisaje con tonos irrepetibles. Más que una excursión, es una invitación a sentir el pulso de la montaña, a maravillarse con su poder y a llevarse un recuerdo imborrable de uno de los escenarios más auténticos y mágicos de Malargüe.
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